La última edición de la pasarela Otoño/Invierno 2025 ha sido un espacio donde la moda se ha mostrado en su máxima diversidad, con propuestas que van desde lo conceptual hasta lo futurista, y de lo nostálgico a lo lúdico. Las tendencias destacadas reflejan un enfoque único de las marcas independientes que han apostado por un lenguaje personal y experimental en sus colecciones.
Uno de los aspectos más sobresalientes en esta versión fue la aplicación innovadora de las transparencias. Alejándose de su habitual connotación sensual, la transparencia se utilizó como una capa estructural, aportando una dimensión arquitectónica a las piezas de vestuario. Telas translúcidas cubrieron el cuerpo, formando una silueta etérea y orgánica que invita a una interpretación renovada de la moda, más fluida y ligera.
Otra de las grandes tendencias fue la deconstrucción de la camisa clásica. Tradicionalmente asociada al entorno corporativo y masculino, esta prenda ha sido reinterpretada con mangas desproporcionadas, formas desestructuradas y combinaciones inusuales, transformándola en una pieza más lúdica y experimental. Esta tendencia desafía los códigos tradicionales, acercándolos a un terreno más creativo y libre.
La fusión sin restricciones también se destacó con notable intensidad. Líneas sobre estampados, texturas opuestas y proporciones asimétricas se apoderaron de las pasarelas, promoviendo el caos intencionado. Esta perspectiva invita a mezclar sin temor, abandonando las normas clásicas de la moda para elaborar composiciones auténticas que atraen la mirada.
En lo que respecta a las prendas esenciales, el abrigo de piel ha mantenido su importancia, pero ahora con un aire contemporáneo. A pesar de que el estilo retro persiste, se ha transformado con modelos más amplios, looks relajados y tonos vibrantes, optando por un estilo maximalista y audaz. Esta estación, el abrigo de piel se muestra no solo como una prenda para proteger del frío, sino también como un componente destacado del vestuario.
El atuendo rojo ha logrado establecerse como una de las prendas imprescindibles más adaptables de la estación. Desde diseños sueltos hasta elecciones con traslúcidas, este tono ha mostrado su habilidad para ajustarse a variados estilos y eventos, siendo una elección ideal para cualquier momento del día o la noche.
El volumen minimalista también ha tenido su protagonismo. Siluetas amplificadas, líneas limpias y conjuntos monocromáticos han llevado la estética minimalista a nuevas alturas, destacando la simplicidad como una forma de elegancia. Este enfoque permite que las prendas se construyan con gran estructura, sin recargar el mensaje visual, lo que resulta en looks sofisticados pero cómodos.
Por último, el estilo techwear también se popularizó, adaptado para el día a día. Con diseños técnicos y materiales duraderos, estas ropas funcionales están diseñadas para ajustarse a la vida urbana manteniendo el sentido de la moda. Las diversas cremalleras, bolsillos y cortes prácticos crean un aspecto que une lo útil con lo contemporáneo, ideal para quienes desean una moda que sea tanto estética como funcional.